Aotearoa/Nueva Zelanda: luto nacional por muerte de 29 mineros
Published by MAC on 2010-11-29Source: AFP, Europa Press
Luto nacional en Nueva Zelanda por muerte de 29 mineros
Neil Sands
AFP
24 de noviembre 2010
GREYMOUTH, Nueva Zelanda — El gobierno neozelandés decretó el miércoles un duelo nacional tras dar por muertos a los 29 mineros que se encontraban desaparecidos en el fondo de una mina desde hacía cinco días, después de registrarse una violenta explosión que terminó con la esperanza de hallarlos en vida.
"Desgraciadamente tengo que anunciar a los neozelandeses que hubo otra explosión muy fuerte hoy a las 14H37 (01H37 GMT) bajo tierra y que (...) nadie sobrevivió", declaró el comandante de la policía Gary Knowles, que coordina las operaciones de socorro.
"Todos murieron. Ahora iniciamos la fase de recuperación" de los cadáveres, dijo el responsable de la policía.
"Estaba en la mina cuando esto se produjo y la explosión fue terrible", agregó.
Poco después, el primer ministro John Key, dijo en una conferencia de prensa que Nueva Zelanda vivía una "tragedia nacional" y anunció que las banderas serían colocadas a media asta en los edificio públicos, en señal de duelo.
"Somos una nación en duelo", afirmó Key.
Las familias abandonaron llorando una reunión con los responsables que les anunciaron la mala noticia.
Los desaparecidos, que tenían entre 17 y 62 años, eran 24 neozelandeses, dos australianos, dos británicos y un sudafricano.
El viernes pasado, después de la primera explosión, dos mineros, levemente heridos, habían conseguido llegar a la superficie.
"No puedo creerlo. Es la página más oscura de la historia de la West Coast (región donde se encuentra la mina). No puede ser peor", declaró el alcalde del condado, Tony Kokshoorn.
Desde que se produjo la explosión de grisú, el viernes en la tarde, ningún contacto pudo establecerse con los mineros de la mina de carbón de Pike River, situada en la costa oeste de la Isla de Sur de Nueva Zelanda.
Algunos parientes expresaron su exasperación y su cólera, después de cinco días de espera y de socorros inmóviles.
Algunos "injuriaron" a los responsables que les dieron la noticia, indicó Lawrie Drew, cuyo hijo Zen, de 21 años, figura entre los desaparecidos.
El hombre dijo que agradecía al director de la mina y al comandante de la policía que dirigieron las operaciones, pero estimó que los socorristas habrían podido entrar a la mina inmediatamente después de la primera explosión el viernes.
"Lo único que podría hacer ésto aún peor es saber que seguían vivos después de la primera explosión", declaró a la cadena Sky News.
Las anteriores declaraciones de la policía y del director de la mina ya dejaban presagiar lo peor.
El miércoles en la mañana, la policía había indicado que las muestras obtenidas cerca del lugar donde se encontrarían los mineros revelaban una concentración "extrema" de gas tóxico en el túnel.
"Como suponíamos y no como esperaban las familias, el aire que nos llegó presentaba una concentración extremadamente elevada de monóxido de carbono, muy fuerte de metano y muy poco oxígeno", había advertido el director de la mina, Peter Whittall.
Un vídeo registrado por una cámara de vigilancia había mostrado la fuerza de la explosión del viernes, con nubes de polvo proyectados fuera del socavón después de 52 segundos de estruendo.
Nueva Zelanda da por muertos a los 29 mineros
http://www.europapress.es
24 de noviembre 2010
La Policía de Nueva Zelanda descarta que los 29 mineros atrapados en una mina de carbón hayan sobrevivido a la segunda explosión de gas metano registrada bajo tierra. "Creemos que nadie ha sobrevivido y que todo el mundo habrá perecido. Es una de las cosas más trágicas que he tenido que hacer como agente de Policía", ha narrado este miércoles el superintendente Gary Knowles.
Los hombres quedaron atrapados en un túnel de 2,3 kilómetros de largo el pasado viernes a consecuencia de una primera explosión de gas metano. La mina, explotada por la compañía Pike River Coal, se encuentra en la isla del Sur, cerca de la localidad de Greymouth. Las víctimas son 24 neozelandeses, dos australianos, dos británicos y un sudafricano.
El temor al efecto de los gases tóxicos y a que se sucedieran nuevas detonaciones echó atrás a los rescatadores a la hora de adentrarse en el túnel. A cambio utilizaron robots y dispositivos electrónicos, pero no se pudo mantener contacto con las víctimas ni detectar señal de vida alguna.
El miércoles por la mañana los rescatadores, pese a descartar casi por completo que hubiera supervivientes, continuaban analizando los niveles de gases tóxicos con la esperanza de que bajaran. A primera hora de la tarde (madrugada en España) se registró la segunda explosión de gas metano, mucho mayor que la primera.
"La causa fue otra vez la acumulación de gases de los últimos seis días. Una mezcla letal incendió la mina entera", ha dicho el alcalde de Greymouth, Tony Kokshoorn. "Es la hora más oscura para la costa oeste", añadió, en referencia a la zona donde se encuentra la ciudad.
El director ejecutivo de Pike River Coal, Peter Whittall, señaló que "los equipos de rescate habrían puesto sus vidas en serio peligro" si hubieran accedido a la mina. "Cuando estábamos ahí haciendo esa valoración, exactamente lo que dijimos que podía ocurrir, ocurrió", ha agregado Whittall, para quien muchos de los rescatadores "nunca habrían vuelto con vida".
Algunos familiares de las víctimas han venido criticando que nadie entrara inmediatamente a la mina para salvar a los mineros, después de que se consumieran los gases tóxicos de la primera explosión.
Apenas 50 kilómetros al norte del lugar de la tragedia hay otra mina en la que se cree que un incendio continúa activo desde hace casi 60 años.