Ministerio Del Ambiente Devel贸 Contaminaci贸n Por Carb贸n En El Estado Zulia
Published by MAC on 2007-07-14Source: EL UNIVERSAL
VENEZUELA
Ministerio del Ambiente develó contaminación por carbón en el estado Zulia
Por MARIANNA PÁRRAGA, EL UNIVERSAL
martes 26 de junio, 2007
http://economia.eluniversal.com
Caracas, Venezuela - Una minuciosa evaluación del Ministerio del Ambiente con respecto al desarrollo de la explotación del carbón en el estado Zulia constató en 2005 lo que grupos ambientalistas han estado advirtiendo: las fuentes de agua y el aire que respiran los pobladores de la zona están comprometidos como consecuencia de esa actividad y su eventual expansión empeoraría las condiciones existentes. De acuerdo con el informe ejecutivo del Ministerio, de julio de 2005, las fosas Miraflores, Buena Vista Oeste y Buena Vista Sur y el Caño Santa Rosa tienen una concentración de plomo, sulfatos, cadmio, cianuro y mercurio, superior a la permitida por la normativa actual.
Las mediciones, hechas por el Ministerio y por laboratorios privados contratados por el Estado y por la propia Carbozulia, develaron que en el llamado Caño Paso Diablo, ubicado en la zona de influencia de la mina Paso Diablo, una de las más activas en la actualidad, el ph de las aguas superficiales es superior a lo normal, debido a la existencia de niveles se sulfatos mayores al estándar permitido.
El sulfato de aluminio es utilizado normalmente en la minería en los procesos de coagulación que permiten separar partículas del agua. La normativa vigente permite un máximo de 400 miligramos de sulfato por litro y, según cuatro mediciones realizadas entre abril y diciembre de 2004 en Paso Diablo, las concentraciones detectadas se situaron por encima de los 880 miligramos por litro.
La alta concentración de sulfato produce lagunas insalubres. El Ministerio del Ambiente encontró varias de ellas y planteó dudas sobre el destino de esas aguas, que deberían obligatoriamente ser tratadas antes de su disposición y previamente a los períodos de lluvias, que las diluyen junto al resto de los cuerpos de agua de la zona. En las aguas subterráneas de Paso Diablo también se encontraron concentraciones puntuales de sulfatos superiores a lo permitido, pero el diagnóstico del aire fue poco esperanzador: tanto en Mina Norte como en Paso Diablo, la existencia de partículas de carbón suspendidas en el aire triplicó lo permitido en cuatro de las seis estaciones de observación escogidas y en las otras dos también se ubicó por encima de los estándares.
Enfermos y desplazados
Lusbi Portillo, profesor de la Universidad del Zulia y activista de la organización Homo et Natura, dice tener suficientes argumentos por los cuales se debe hacer una férrea oposición a la entrega de nuevas concesiones para la explotación de carbón en el estado Zulia. El primero de ellos es el ambiente. "Nuestros ríos, entre ellos el río Guasare, están contaminados y se están secando. Así lo ha demostrado no sólo el Ministerio del Ambiente, sino varios estudios de la Universidad del Zulia. Los embalses Manuelote y Tulé, que surten por completo a Maracaibo, la Costa Oriental del Lago y el Complejo Petroquímico El Tablazo, se encuentran ubicados en medio de la zona de influencia de las minas de carbón, lo cual pone en peligro el suministro de agua a todo el estado Zulia".
Además de las consecuencias evidentes de la contaminación de las aguas, Portillo afirma que el desarrollo del carbón ha acabado con 1.800 hectáreas de bosques que ahora "no son más que cráteres" y ha comprometido la salud de pobladores de comunidades cercanas, incluyendo asentamientos indígenas, pues la concentración de partículas de carbón en el aire es tan grande que hasta a varios obreros portuarios se les ha detectado neumoconiosis, una enfermedad que puede resultar de la alta exposición pulmonar a las partículas de carbón. A esto se suma el efecto que causa la acumulación de los escombros resultantes de la actividad carbonífera. Portillo cuenta con testimonios de varios habitantes de la localidad de Mata Grande que han sufrido afecciones severas de la piel a causa de ello.
Un segundo argumento en contra del carbón es el reemplazo de superficies cultivables - por cada tonelada de carbón extraído se requiere deforestar cinco toneladas de suelos - y el desplazamiento de etnias indígenas de sus zonas de influencia originales, lo cual no ha sido penalizado por la carencia de una demarcación específica de los asentamientos, tal como lo establece la Ley de Pueblos Indígenas. Esto último ha motivado la movilización de representantes de las etnias wayúu, bari y yukpa en contra del carbón, aun cuando directivos del Ministerio de Industrias Básicas y Minería señalan que la razón de las protestas indígenas realmente responde a su exclusión de los proyectos carboníferos.
Un último argumento se relaciona con los métodos de extracción que se utilizan en el país. Aunque varios de los proyectos en espera contemplan el empleo de técnicas de minería subterránea, la mayor parte de esta actividad se ejerce hoy en día a cielo abierto y, según afirma Portillo, con métodos indebidos, como la extracción desautorizada de madera.
Tomando todo esto como punto de partida, algunas de las conclusiones a las que llegó el Ministerio del Ambiente en su informe es que mantener la explotación de carbón tal y como está, continuará generando una "afectación localizada de la calidad del aire", minimizará el empleo agroturístico y continuará contaminando las aguas en los municipios Mara y Páez, problemas que no se han resuelto "en 17 años de actividad".
Pero la eventual expansión de las explotaciones, para pasar de 8 a 22 millones de toneladas de carbón al año, incrementaría la afectación de los recursos naturales, aumentaría "considerablemente" la concentración de sulfatos en los embalses, disminuiría el volumen de las aguas superficiales, desplazaría poblaciones y reduciría la biodiversidad de la zona. "Basados en el artículo 128 de la Constitución sobre el modelo sustentable de país, vale la pena preguntarse: ¿sobre qué base se sustenta la expansión de la explotación carbonífera en el Zulia?", concluyó el informe del Ministerio.
EEUU es el principal comprador
Según el diagnóstico que sobre la actividad carbonífera hizo el Ministerio del Ambiente, esta industria mueve casi 700 millardos de bolívares al año en el país, de los cuales a Corpozulia y al Mibam le quedan alrededor de 75 millardos en regalías y pagos, al Estado en forma directa otros 75 millardos como accionista, a las alcaldías ingresan otros 7 millardos y en ISLR se pagan 20 millardos, de manera que de los ingresos brutos de las empresas carboneras, al Estado le corresponde alrededor de 35%.
Otro hallazgo con respecto al carbón es que la mayor parte de las exportaciones tiene como destino Estados Unidos, siendo Italia el segundo mayor receptor del carbón venezolano. Sólo al país del Norte llega casi 40% de las ventas externas de Carbones de La Guajira y Carbones del Guasare, las dos principales empresas productoras del país, en las cuales participa Carbozulia, filial de Corpozulia desde 2004, cuando le fue traspasada a Pdvsa.
Otros de los compradores internacionales de carbón venezolano son Canadá, España, Holanda, Francia y Suecia, así como naciones vecinas como Brasil y Perú. A estos destinos se exportaron en el año 2002, según cifras del antes Ministerio de Energía y Minas, 7,5 millones de toneladas métricas. El valor de esas exportaciones superó los 323 millardos de bolívares, un número que no ha surtido mayores variaciones en el último lustro.
"De las 8 millones de toneladas de carbón que se extraen en el país, apenas unas 100 mil toneladas son de uso local", explicó el profesor Lusbi Portillo. Sin embargo, el proyecto de instalar plantas carboeléctricas en suelo nacional -la primera de ellas está en evaluación en La Fría, estado Táchira- podría cambiar esa realidad. La exportación de la mayor parte del carbón venezolano a EEUU fue uno de los argumentos utilizados por el Ministerio del Ambiente para fijar su posición adversa a la expansión de la actividad carbonífera en el país.