Doe Run, ¿déjà vu?

Published by MAC on 2012-04-11
Source: Cooperacción, La República, Reuters

La Oroya, una ciudad envenenada por mentiras y emisiones.

DOE RUN, DÉJÀ VU
 
CooperAcción

4 de abril 2012

Montañas de residuos tóxicos en La Oroya, Perú. Fuente: La República

Déjà vu significa en francés algo ya visto. El concepto describe la experiencia de sentir que ya se ha sido testigo o se ha experimentado una situación en el pasado y que vuelve a aparecer de golpe en el presente.

Con Doe Run ocurre eso. Todo lo que dice esta empresa en sus costosos comunicados, son medias verdades o mentiras completas, que por supuesto no hay que creer. Algunos ejemplos del déjà vu Doe Run:

- La empresa ha dicho la semana pasada que ha presentado su plan de restructuración en una fecha, pero resulta que ese mismo plan ha sido cambiado por la propia empresa y uno no sabe a qué atenerse.

- La empresa ha dicho que según el plan comenzaría a operar el 1 de mayo, pero resulta que ahora se habla del mes de junio, sin que exista certeza que finalmente se cumpla con los plazos que se anuncian.

- La empresa ha dicho que Apoyo Consultoría había validado el plan de restructuración presentado, pero resulta que la consultora ha señalado que no ha validado nada.

- Además, en su nueva versión de Plan de Reestructuración, Doe Run está exigiendo que el Estado peruano asuma toda la responsabilidad en la demanda de Missouri.

- Los trabajadores que apoyan a Doe Run han iniciado un bloqueo de la carretera central en pleno inicio de la Semana Santa para presionar al gobierno.

Todos estos hechos (medias verdades, mentiras descaradas, bloqueo de carreteras, declaraciones cínicas de los principales directivos de la empresa, etc.) ocurrieron exactamente en los años 2006 y 2009, cuando Doe Run buscaba lo mismo: una nueva ampliación del plazo para ejecutar supuestamente sus inversiones ambientales.

Con Doe Run, el déjà vu no es una sensación: es una certeza. Todo esto ya ocurrió. Doe Run no tiene ninguna credibilidad. Depende de los peruanos y sobre todo de nuestras autoridades que la historia no se repita y que esta empresa no siga condenando a La Oroya y a su población a vivir en un ambiente envenenado por sus mentiras y por las emisiones de su chimenea.

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Expresan solidaridad con monseñor Pedro Barreto y piden investigar amenazas

http://www.larepublica.pe/

13 de marzo 2012

Tras conocerse las amenazas de muerte que recibió monseñor Pedro Barreto, arzobispo de Huancayo, apenas dos días después de demandar que la solicitud de Doe Run Perú para reiniciar sus actividades en La Oroya se haga efectiva solo si la minera cumple con su Programa de Adecuación de Manejo Ambiental (PAMA), la congregación de Misioneros Oblatos de María Inmaculada expresó su honda preocupación por la vida del religioso y por quienes trabajan junto con él en el proyecto Mantaro Revive.

Del mismo modo, la entidad invocó a las autoridades de nuestro país a llevar adelante las investigaciones necesarias para identificar a los responsables de ese hecho que, consideran, "denigra la imagen de la democracia peruana". 

El documento de la congregación religiosa que tiene sede en Roma está firmado por el padre Gilberto Piñón Gaytán, segundo asistente general de la misma.

Como se recuerda, hace diez días se supo que un trabajador de la Pastoral Social de Dignidad Humana (Passdih) de Huancayo recibió una llamada telefónica, cuyo interlocutor le dijo: "Tú y tu jefe se van a ir al cielo, vayan comprando su ataúd".

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Perú dice Doe Run debe culminar plan ambiental para poder operar

Reuters

27 de marzo 2012

La atribulada firma Doe Run deberá culminar un plan ambiental clave para poder reiniciar las operaciones en el mayor complejo metalúrgico de Perú, dijo el martes el Gobierno peruano.

La planta de Doe Run Perú, otrora la sexta exportadora de metales de la nación andina, fue paralizada en el 2009 en medio de los problemas financieros de la compañía, lo que dejó en la incertidumbre a unos 3.500 trabajadores.

Pero a mediados de enero, una junta de acreedores decidió reestructurar y no liquidar la empresa, aunque falta que apruebe el plan para llevar a cabo ese proceso.

El primer ministro, Oscar Valdés, afirmó que el Gobierno no permitirá que Doe Run Perú, controlada por el estadounidense Renco Group, siga contaminando el medio ambiente en La Oroya, la empobrecida zona donde está ubicada la fundición metalúrgica.

"Mientras que no se construya la planta esto no va (el reinicio de operaciones). Y no va porque de ninguna manera vamos a permitir que se siga envenenando a los peruanos y que una empresa se valga de una serie de artificios para seguir operando ahí y contaminando", dijo Valdés al canal de televisión estatal.

Valdés destacó que el Estado peruano es uno de los principales acreedores de Doe Run, por lo que el Gobierno estará muy atento a que el proceso de restructuración garantice la protección del medio ambiente y la salud de los pobladores.

El Gobierno peruano se convirtió en el mayor acreedor de Doe Run Perú-con un 36 por ciento de las acreencias- luego de que la empresa incumplió un plan de remediación ambiental en La Oroya valorizado en unos 150 millones de dólares.

"Doe Run es un tema bastante complicado, es una empresa que ha demandado al Perú ante el CIADI, tiene un problema en la corte por delitos de lesa humanidad por la vida de 100 niños y esas cosas no las podemos soslayar acá, eso tiene que estar en las mesas de negociaciones", acotó el primer ministro.

Para poder reiniciar sus operaciones, Doe Run requiere que el Congreso peruano extienda el plazo para la culminación de su plan ambiental, que deberá mejorar o remediar la zona en la que operó tras años de contaminación.

En septiembre del 2009, el Congreso aprobó la ampliación por 30 meses del plazo para la concreción del plan de remediación ambiental. Pero la metalúrgica incumplió su compromiso, por lo que el entonces gobierno del presidente Alan García dijo que retiraría la licencia de la empresa.

El otro importante acreedor de Doe Run Perú es Doe Run Cayman -una unidad especial-, con un 35 por ciento. El resto son principalmente proveedores de minerales, a los que la compañía debe unos 100 millones de dólares.